Casi todos los países del orbe tienen una flor nacional, que los representa en las lides del espíritu o del arte. En la mayoría de ellos dicha flor fue consagrada por la historia, la tradición, la predilección de una reina o monarca, o por elección popular.


lunes, 8 de septiembre de 2014

Chile, copuhue



La flora chilena se caracteriza por ser amplia y muy atractiva. Pero de todas los ejemplares del reino vegetal de este país, hay uno muy particular: copihue. El copihue es una flor nativa de Chile, de color rojo, rosado o blanco. Tiene forma de campana y sus hojas se abren en el verano. Su pistilo siempre apunta hacia abajo y a veces nace de él un fruto con forma de baya que las antiguas comunidades mapuches comían. Se puede encontrar en el sur del país, en las zonas más boscosas de las regiones australes, aunque antes era muy común en la zona centro también. Su nombre proviene del vocablo mapuche “kopiwe”, que significa “estar boca abajo”. 
Su ambiente natural lo constituyen los lugares húmedos y rodeados de vegetación.


El copihue nace de una planta de enredadera que puede alcanzar hasta diez metros de altura, al encaramarse sobre arbustos y árboles. Las hojas de esta hiedra trepadora son de color verde oscuro y miden entre 10 y 15 centímetros. El copihue florece durante los meses de primavera y verano. Su flor puede alcanzar a medir hasta 10 centímetros, está compuesta por seis pétalos que en conjunto dan la típica forma de campana. Dependiendo del lugar, adopta colores como el rosado, blanco o rojo intenso.